Artículo Original
Knowledge Management in Second and Third Period Nursing Students of the Metropolitan
University of Ecuador
Juan E. Pérez
Reyes, Lidys Padrón Fernández, Edelio Placencia Medina , Raymundo Pérez Urquiza
Universidad
Metropolitana del Ecuador, Sede Quito, Campus Coruña, e
Escuela Superior Politécnica
de Chimborazo. Escuela de Medicina, Ecuador.
La correspondencia sobre este artículo
debe ser dirigida a Dr. Juan E. Pérez Reyes
Email: juanernesto1976@gmail.com
Fecha de recepción: 6 de enero de 2020.
Fecha de aceptación: 11 de febrero de 2020.
¿Cómo citar este artículo? (Normas APA): Pérez Reyes, J. E., Padrón Fernández,
L., Placencia Medina,
E., & Pérez Urquiza, R. (2020).
Gestión
del Conocimiento en Estudiantes de Segundo y Tercer Períodos de la Carrera de
Enfermería de la Universidad Metropolitana del Ecuador. Revista
Científica Hallazgos21, 5(1), 34-46. Recuperado de http://revistas.pucese.edu.ec/hallazgos21/
Resumen
Los hábitos de estudio
se encuentran entre las temáticas más relevantes en el ámbito académico, al
considerar que poseen una vinculación muy relacionada con el rendimiento
académico de los estudiantes. En este contexto, un equipo docente se motivó a
realizar la presente investigación, con el objetivo de identificar las
características del proceso de gestión del conocimiento en los estudiantes de
Segundo y Tercer Periodos de la Carrera de Enfermería, de la Universidad
Metropolitana del Ecuador, Sede Quito, Campus Coruña. Se realizó un estudio
descriptivo, observacional y retrospectivo, en el período comprendido de
octubre y diciembre de 2019. Como técnica para la recolección de información,
se utilizó la encuesta. El universo estuvo constituido por los 200 estudiantes
y la muestra por 186. La información recolectada fue sometida al
correspondiente proceso de codificación, tabulación y análisis estadístico. Se pudo conocer que la mayoría de los estudiantes dedicaba entre 60 y 120
minutos al estudio individual diariamente, sin embargo, un número significativo
solamente destinaba menos de 30 minutos. Se logró
determinar que la mayoría comenzaba a estudiar con solo un día de antelación.
Predominaron quienes estudiaban en su hogar. Resultó significativo que casi la mitad manifestó
que empleaba la memorización como técnica para apropiarse de los conocimientos
y que pocos realizaban mapas conceptuales, cuadros comparativos o esquemas.
Entre los estados que generaban mayor pérdida de concentración en el momento
del estudio se hallaron el uso del celular, los problemas con el trabajo y las
dificultades económicas. Predominaron los
estudiantes que consideraron que la mayor parte de las veces existía relación
entre lo estudiado y las prácticas de laboratorio y preprofesionales. La
mayoría declaró que, con el incremento de las horas de actividades prácticas y
complementando las clases con materiales audiovisuales, aprenderían mejor los
contenidos. Estos resultados evidenciaron la necesidad de crear una estrategia
para mejorar los hábitos de estudio de los estudiantes desde el inicio de la
carrera, en cada uno de los escenarios educativos.
Palabras
clave: hábitos de estudio;
rendimiento académico; estudiantes; gestión del conocimiento.
Abstract
Study habits are among the most relevant topics in the academic field,
considering that they have a relationship closely related to the academic
performance of students. In this context, a teaching team was motivated to
carry out this research, with the objective of identifying the characteristics
of the knowledge management process in students of Second and Third Periods of
the Nursing studies, from the Metropolitan University of Ecuador, Quito, Coruña Campus. A descriptive, observational and
retrospective study was carried out in the period from October to December
2019. A survey was used as the technique for collecting information. The
universe consisted of 200 students and the sample was 186. The information
collected was submitted to the corresponding process of coding, tabulation and
statistical analysis. It was known that most students spent between 60 and 120
minutes daily on individual study; however, a significant number only spent
less than 30 minutes. It was determined that the majority of
them began to study just one day before the test. Those who studied at home
predominated. It was significant that almost half of them said they used
memorization as a technique to learn and that only a few made concept maps,
comparative tables or schematic diagrams. Among the states that generated the
greatest loss of concentration at the time of studying were the use of cell phones,
problems with work and economic difficulties. Many students considered that
most of the time there was a relationship between what was studied and laboratory
and pre-professional practices. The majority declared that, by increasing the
hours of practical activities and complementing the classes with audiovisual
materials, they would learn the contents better. These results evidence the
need to create a strategy to improve the study habits of students from the
beginning of the university studies, in each of the educational settings.
Keywords: study habits;
academic performance; students; knowledge management.
Gestión del
Conocimiento en Estudiantes de Segundo y Tercer Períodos de la Carrera de
Enfermería de la Universidad Metropolitana del Ecuador
Los hábitos y técnicas
de estudio se encuentran actualmente entre las temáticas más relevantes en el
ámbito académico, al considerar que poseen una vinculación muy relacionada con
el rendimiento académico de los educandos (Cruz & Quiñones, 2011). Los métodos de estudio han sido abordados por varios
autores como el camino adecuado para llegar a un fin académico propuesto, cuyo resultado
es fundamental para la gestión del conocimiento dentro del campo de las
relaciones intelectuales, al permitir orientar y promover los buenos métodos de
estudio (Acevedo, Torres, & Tirado, 2015).
A nivel internacional
y nacional, se ha evidenciado en los últimos años gran interés por identificar
las características de los hábitos de estudio de los estudiantes
universitarios, motivado en gran medida por el incremento de calificaciones
regulares y reprobadas. Varios autores
han comprobado que las técnicas y modalidades de estudio se relacionan
directamente con el rendimiento académico y el futuro desempeño de los profesionales
(Pineda & Alcántara, 2017).
Para los docentes y
estudiantes de los primeros niveles académicos, la aprobación de las
asignaturas de la carrera de Enfermería representa todo un reto, debido a la
carencia de cimientos básicos en la organización del proceso de aprendizaje por
parte del estudiantado. Entre los factores que pueden asociarse al nivel de
rendimiento del estudiante se encuentran los hábitos de estudio que posee el
educando. No todos los estudiantes se adaptan fácilmente a los retos de la vida
universitaria, la cual implica mayor dedicación al estudio y mejor selección de
métodos y técnicas para apropiarse más eficazmente de los conocimientos (Pineda & Alcántara, 2017).
Para el año 2021, la
Universidad Metropolitana del Ecuador (UMET) se ha propuesto convertirse
progresivamente en una institución de excelencia en la formación de
profesionales, enfocada en la pertinencia de las políticas nacionales, el
desarrollo socioeconómico, la inclusión y la consecución del buen vivir (Universidad Metropolitana del Ecuador, 2019). Esta
institución exige más que nunca un carácter dinámico en el proceso docente- investigativo.
En tal sentido, la gestión de los resultados del aprendizaje se enfoca en la
consolidación de la investigación para obtener mejores resultados y lograr
salidas de impacto. Para ello la universidad deberá potenciar las estrategias
para mejorar la cultura estudiantil en torno al cómo gestiona los conocimientos
recibidos (Universidad Metropolitana del
Ecuador, 2019).
Con estos antecedentes,
este equipo docente se motivó a realizar la presente investigación, con el
objetivo de identificar las características del proceso de gestión del
conocimiento en los estudiantes de Segundo y Tercer Periodos de la Carrera de
Enfermería, de la Universidad Metropolitana del Ecuador, Sede Quito, Campus Coruña,
esperando que las debilidades y potencialidades identificadas permitan al
colectivo docente diseñar estrategias de trabajo que contribuyan a fortalecer el
proceso docente educativo en la institución.
Método
Se realizó un estudio de
tipo descriptivo, observacional y retrospectivo, en el periodo comprendido de
octubre a diciembre de 2019, con el objetivo de identificar las características
de la gestión del conocimiento en los estudiantes de segundo y tercer periodos
de la Carrera de Enfermería, de la Universidad Metropolitana del Ecuador, Sede Quito,
Campus Coruña. Como técnica específica para la recolección de información se
utilizó la encuesta. Según la fuente de investigación utilizada, se trató de
una investigación de campo.
El universo de estudio
estuvo constituido por los 200 estudiantes matriculados en el segundo y tercer periodos
de la Carrera de Enfermería, de la Universidad Metropolitana del Ecuador, en la
sede Quito, campus Coruña. Luego de solicitar el Consentimiento Informado para
participar en el estudio, a partir de la disposición de cada estudiante a
responder la encuesta, la muestra quedó conformada finalmente por 186
estudiantes, siendo representativa. La encuesta aplicada se diseñó didácticamente
por los autores, tomado en consideración los componentes de organización,
metodología y subjetividad en el aprendizaje, así como la estructura de la interrelación
de lo estudiado con otras áreas del conocimiento, abarcando en total 10
preguntas. Luego fue validada por el criterio de 3 profesores de amplia
experiencia docente y grado científico doctoral, quienes son expertos en
Pedagogía.
La información
recolectada fue sometida al correspondiente proceso de codificación, tabulación
y análisis estadístico. Los resultados fueron expresados en tablas y figuras y
analizados mediante la comparación con los hallazgos descritos por otros
autores nacionales e internacionales. A
partir de ahí, se emitieron las conclusiones.
Resultados
Mediante
esta investigación en la Universidad
Metropolitana del Ecuador (UMET), Sede Quito, Campus Coruña, desarrollada con
el objetivo de identificar las
características del proceso de gestión del conocimiento en los estudiantes, se
evidenció que la muestra estuvo constituida por 154 estudiantes del género
femenino (82,8%), contra solo 32 del género masculino. En tal sentido, también
se observó el grupo de autoidentificación étnica de los mestizos como el más
incidente (95,7%) (ver Figura 1). De igual forma, predominaron las edades de 21
a 25 años (61,3%).
La recopilación de los resultados concernientes a la
organización del proceso de aprendizaje permitió observar que la mayor cantidad
de estudiantes (67, 36,0%) dedicaba entre 60 y 120 minutos al estudio
individual diariamente. Sin embargo, el 30,1% (56 estudiantes) declaró que solo
estudiaba entre 30 y 60 minutos cada día. Resulta alarmante que casi el 20% (34
estudiantes) informó que dedicaba solamente menos de 30 minutos diarios al
estudio individual (Figura 2).
Al analizar los
tiempos de antelación con que los alumnos comenzaban a estudiar, se logró
conocer que la mayoría lo hacía con solo un día de antelación (59,1%). Solo una
pequeña parte comenzaba a estudiar 7 o más días antes de los exámenes (9,1%)
(Figura 3). Por su parte, al describir los lugares donde se realizaba el
estudio individual, se identificó que el 82,3% estudiaba en el hogar. Llama la
atención que el 22,0% de los discentes estudiaba en algún medio de transporte y
que tan solo una minoría (12,9%) lo hacía en el Centro de Recursos para el Aprendizaje
y la Investigación (CRAI) de la UMET.
Con
relación a los métodos del aprendizaje, se apreció que entre las técnicas
utilizadas más frecuentemente para estudiar, se encontraron la toma de apuntes
y notas (51,6%) y la realización de resúmenes escritos (51,1%). Resultó
significativo que casi la mitad de la muestra (46,8%) manifestó que empleaba la
memorización como técnica para apropiarse de los conocimientos y que pocos realizaban
mapas conceptuales (15,1%), cuadros comparativos (5,4%) o esquemas (3,2%). En
este contexto, las fuentes utilizadas más frecuentemente para estudiar fueron
las presentaciones en PowerPoint que ofrecían los docentes (87,6%). Quedó evidenciado,
además, que solo el 23,7% de los encuestados
estudiaba a partir de las bibliografías orientadas por los docentes y que tan
solo el 11, 8% partía de los libros de textos del CRAI para gestionar los contenidos
(Tabla 1 y Figura 4).
Mediante
la presente investigación se pudieron apreciar además algunas condiciones subjetivas
que pudieran estar asociadas con la gestión del aprendizaje de los estudiantes.
Entre los factores declarados como estados que generaban distracción o pérdida
de la concentración en el momento del estudio, se hallaron el uso del celular
(50,0%), los problemas con el trabajo (27,4%) y las dificultades económicas
(24,2%) (Tabla 2).
Por su parte, la
recolección de la información vinculada a la interrelación de los contenidos
estudiados con las demás áreas del conocimiento en las materias matriculadas en
el período reveló que la mayoría de los encuestados (55,9%) refirieron que la
mayor parte de las veces existía relación entre lo estudiado y las asignaturas
matriculadas en el período (Figura 5). Se observó también un predominio de los
estudiantes que consideraron que siempre existía relación entre lo estudiado y
las prácticas de laboratorio y preprofesionales (39,78% y 36,02%, respectivamente) (Tabla
3).
Al abordar la forma
en que aprenderían mejor los contenidos estudiados, la mayor parte opinó que
con el incremento de las horas de actividades de prácticas en los laboratorios,
así como de prácticas preprofesionales en alguna unidad de salud y en la
comunidad. Fue interesante conocer que una buena parte de los discentes
considera que aprenderían mejor los contenidos de las materias si contaran con
la proyección de materiales audiovisuales.
Discusión
En
la presente investigación la muestra estuvo
constituida fundamentalmente por estudiantes del género femenino (82,8%). A
nivel internacional, históricamente, ha sido a la mujer a quien se ha asignado
el rol de cuidadora. En tal sentido, ha predominado hasta la actualidad el
género femenino en los profesionales de la enfermería. Afortunadamente, cada
día la presencia de los hombres es mayor, aportando no solo su fuerza física, sino
también una perspectiva diferente del cuidado y originando necesariamente, nuevas
formas de enseñanza en la enfermería. Sin dudas, la incorporación del género
masculino a esta carrera ha modificado la manera de ver esta profesión por
parte de usuarios, estudiantes, docentes y de la sociedad en general (Gullén & Cuevas, 2013). También se observó
que el grupo de autoidentificación étnica de los mestizos fue el más incidente
(95,7%) y que predominaron las edades de 21 a 25 años (61,3%). Este
comportamiento se relaciona con la composición sociodemográfica general de los
estudiantes matriculados en el segundo y
tercer periodos de la Carrera de Enfermería, de la Universidad Metropolitana
del Ecuador, Sede Quito, Campus Coruña, en cuánto a grupo étnico y edades.
El análisis de los
resultados concernientes a la estructura y organización del proceso de aprendizaje,
para conocer cómo estaban utilizando el tiempo de estudio autónomo los
estudiantes, permitió identificar que una discreta mayoría (36,0 %) dedicaba
entre 60 y 120 minutos al estudio individual diariamente. Sin embargo, un
elevado porcentaje (30,1%) declaró que solo estudiaba entre 30 y 60 minutos
cada día. Resulta alarmante, además, que casi el 20% de los estudiantes informó
que solamente dedicaba menos de 30 minutos diarios al estudio individual. Estos
hallazgos se comportan de manera similar a los planteados por investigadores de
la Escuela de Enfermería de la Universidad de Cuenca, la cual abarcó una
muestra de 319 estudiantes y evidenció la carencia de hábitos de estudios
adecuados en el 56,7% de los mismos (Mazón, Montero, & Ortiz,
2014). Por otra parte,
también se ha vinculado el tiempo dedicado al estudio con el rendimiento académico.
Una investigación efectuada en estudiantes de enfermería de Veracruz, México,
reveló que quienes tenían una distribución óptima del tiempo para estudiar,
alcanzaban un rendimiento académico superior, por lo que plantearon que a mejor
distribución del tiempo de autopreparación, mejores
resultados académicos (Cruz & Quiñones,
2011).
La distribución
que realice el estudiante sobre el tiempo que dispone es indispensable, ya que
mediante esta podrá planear las actividades que debe realizar tanto en su vida
personal como profesional, otorgándole a cada actividad el tiempo que
corresponde y con ello lograr resultados favorables. En tal sentido, respecto a
los tiempos de antelación con que comenzaban a estudiar, se logró conocer que
la mayoría lo hacía con solo un día de antelación (59,1%). Solo una pequeña
parte comenzaba a estudiar 7 o más días antes de los exámenes (9,1%). En el mencionado estudio mexicano, se encontró
que el 85% de estudiantes poseían hábitos de estudio calificados como
regulares.
En este contexto, se
ha remarcado el importante rol que juega la manera en cómo distribuye el tiempo
el estudiante en sus actividades académicas; por lo tanto, los profesores
durante sus actividades docentes deben alertar con relación al presupuesto de tiempo
de estudio que demanda la materia. De igual forma, se sugiere efectuar una
planificación del tiempo de estudio y disfrutar de las condiciones mínimas para
que este resulte agradable, eficiente y efectivo.
Por su parte, la
identificación de los lugares donde se realizaba el estudio individual mostró que
el 82,3% estudiaba en el hogar. Llama la atención que el 22,0% de los discentes
lo hacía en algún medio de transporte. En este sentido, en el
estudio realizado en la Escuela de Enfermería de la Universidad de Cuenca se
observó que el 38,9% de los sujetos investigados no efectuaba el estudio en un lugar adecuado.
Por otra parte, cabe recalcar que la UMET cuenta con el Centro de
Recursos para el Aprendizaje y la Investigación, el cual cuenta con tecnología
de punta y pone al servicio de los estudiantes un sistema integrado de gestión
de bibliotecas, permitiendo una fluida navegación y búsqueda dentro de los
repositorios existentes (Universidad
Metropolitana del Ecuador, 2019), sin embargo, el presente estudio
evidenció que solo el 12,9% de los estudiantes gestionaba su estudio individual
mediante el CRAI.
Con
relación a la metodología del aprendizaje, se apreció que entre las técnicas
utilizadas más frecuentemente para estudiar se encontraron la toma de apuntes y
notas (51,6%) y la realización de resúmenes escritos (51,1%). Resultó
significativo que casi la mitad de la muestra (46,8%) manifestó que empleaba la
memorización como técnica para apropiarse de los conocimientos y que pocos
alumnos realizaban mapas conceptuales (15,1%), cuadros comparativos (5,4%) o
esquemas (3,2%).
Es necesario promover
que no es suficiente con solo memorizar los contenidos para aprobar los exámenes,
sino que los discentes deberán ser capaces de gestionar un aprendizaje
significativo y perdurable, a partir de la combinación de un tiempo óptimo de
estudio con técnicas satisfactorias para el mismo. Se ha comprobado que cuando
los estudiantes emplean técnicas de estudio adecuadas (lectura y apuntes, mapas
conceptuales, cuadros comparativos y esquemas), el rendimiento académico se
incrementa. Por ende, al mejorar las técnicas de aprendizaje se podría aumentar
el aprovechamiento de los contenidos estudiados (Cruz
& Quiñones, 2011). En este contexto, resulta meritorio incentivar
estas habilidades en el estudiantado, para lo cual el claustro docente mediante
las asignaturas impartidas deberá potenciar las estrategias y acciones que faciliten
la consolidación de estas habilidades.
Resulta
trascendente prestar interés al tipo de técnica de estudio, considerando que
cada estudiante tendrá importantes cantidades de información para estudiar; por
tanto, resulta necesario que tenga buenas técnicas que faciliten la lectura y
el proceso de aprendizaje. Tomando en consideración la cotidianeidad que se presenta
al realizar las actividades, acompañado de compañeros, televisión, música,
etc., es relevante informar que estos podrían constituir distractores que
afecten los resultados académicos. Aquí radica la importancia de fomentar los
hábitos de concentración en el estudiante de Enfermería.
Tras
el presente estudio se conoció también, que las fuentes utilizadas más
frecuentemente para estudiar fueron las presentaciones PowerPoint que ofrecían
los docentes (87,6%). Quedó evidenciado, además, que solo el 23,7% de los
encuestados estudiaba a partir de las bibliografías orientadas por los docentes
y que tan solo el 11, 8% partía de los libros de textos del CRAI para gestionar
los contenidos. En este contexto, los
investigadores de la Escuela de Enfermería de la Universidad de Cuenca
observaron que el 32,6% de los sujetos investigados realizaba mal uso de los
materiales de estudio (Cruz & Quiñones, 2011).
Se pudieron apreciar
además algunas condiciones subjetivas que pudieran estar asociadas con la
gestión del aprendizaje de los estudiantes. Entre los factores declarados como
estados que generaban distracción o pérdida de la concentración en el momento
del estudio, se halló como más incidente el uso del celular (50,0%). Este
resultado se comportó por encima de lo reportado por una investigación de la
Fundación Universitaria del Área Andina, que abarcó a 462 estudiantes de
diferentes universidades de Pereira. En el mismo, se demostró que el creciente
uso de estos dispositivos estaba desviando la atención de los estudiantes. La
encuesta aplicada reflejó que el 42,6% revisaba el celular mientras
estudiaba y que el 61,3% ignoraba a otras personas para concentrarse en el
dispositivo. El estudio también reflejó que el 47,6% despertaba muy
temprano para usar el celular y que el 83,7% aseguraba que le estaba dedicando
poco tiempo a su preparación académica (El tiempo, 2016). Con estos antecedentes, resulta importante disponer
de una normativa en la cual los estudiantes y docentes determinen las reglas
sobre el uso del celular durante las clases. En consonancia, los profesores
universitarios deberán motivar a los estudiantes para que usen el celular con
fines académicos y en los momentos indicados.
Otros
factores encontrados resultaron los problemas con el trabajo (27,4%) y las
dificultades económicas (24,2%), porque muchos de nuestros estudiantes tienen
que trabajar para poder financiar sus estudios. En tal sentido, una investigación
sobre los hábitos de estudio en los estudiantes del segundo semestre de la
licenciatura de enfermería, de la Universidad Autónoma de San Luis de Potosí en
México, reveló como una de las causas más relacionadas con la disminución de la
concentración a la hora del estudio fue el compartir la misma habitación (García, Torres, Ruiz,& Cortés, 2014). Sin embargo, esta
condición no fue relevante en la muestra investigada por nuestro estudio.
La atención y la concentración
son aspectos esenciales en el proceso de aprendizaje. Los resultados deficientes
en el rendimiento, relacionados con la carencia de concentración, revelan que
los estudiantes deben conocer los aspectos positivos que entraña una buena
concentración, así como de garantizar las condiciones para que se concentren a
la hora de estudiar. Si el estudiante combina su capacidad de concentración con
adecuadas técnicas de estudio, facilitará la gestión de su aprendizaje. A mayor
ambiente de concentración, mejores resultados académicos (Cruz &
Quiñones, 2011).
La experiencia clínica
en el marco hospitalario resulta esencial para la formación de los estudiantes
de la esfera de la salud. En este contexto, se observó que la mayoría de los
encuestados (55,9%) refirieron que la mayor parte de las veces existía relación
entre lo estudiado y las asignaturas matriculadas. Se evidenció también un
predominio de los estudiantes que consideraron que la mayor parte de las veces
existía relación entre lo estudiado y las prácticas de laboratorio y
preprofesionales (40,3% y 36,6%, respectivamente).
Al abordar la forma en
que se aprendería mejor los contenidos estudiados, la mayor parte expuso que
con el incremento de las horas de actividades de prácticas en los laboratorios,
así como de prácticas preprofesionales en alguna unidad de salud y en la
comunidad. Al respecto, un estudio realizado para valorar las experiencias del
aprendizaje en la práctica profesional de estudiantes del área de la salud, en
Chile, reiteró que el aprendizaje en las disciplinas sanitarias es un proceso complejo.
No solo es teórico: la práctica académica in situ es fundamental (Araya,
Bianchetti, Torres, & Véliz, 2017). Mediante las
prácticas preprofesionales, el futuro enfermero aprenderá a dominar no solo los
estados mórbidos y las técnicas importantes para su control, sino que también logrará
un enfoque de cuidados sanitarios integrales, extendiéndolos holísticamente a la
persona, la familia y la sociedad (Tessa & Silvera, 2014).
Por último, en el
presente estudio se destacó que muchos estudiantes refirió
que aprenderían mejor los contenidos impartidos si contaran con la proyección
de materiales audiovisuales. Al respecto, una investigación de la Universidad
Autónoma de México, que abordó el mejoramiento de la enseñanza a través de
videos educativos en la línea curricular de la carrera de Enfermería en
Zaragoza, evidenció que los recursos audiovisuales como estrategias de
enseñanza, fomentan el cambio de una educación tradicional hacia una que
integra los cambios tecnológicos para mejorar el aprendizaje (Agama
et al.,2016). También, la
evidencia recolectada por investigadores del Centro Médico Universitario de
Oregón demostró que los recursos audiovisuales contribuyen de manera singular a
desarrollar la empatía y favorecen la expresión de las interioridades de los
alumnos (Woodworth, Chen, Horn, & Aziz, 2014).
Conclusiones
y Recomendaciones
La
presente investigación permitió conocer que la mayoría de los estudiantes dedicaba entre 60 y 120
minutos al estudio individual diariamente; sin embargo, un número significativo
solamente destinaba menos de 30 minutos. Se
logró determinar que la mayoría comenzaba a estudiar con solo un día de
antelación y que predominaron quienes acostumbraban a estudiaban en su hogar. Una
considerable parte estudiaba frecuentemente en algún medio de transporte y solo
una minoría en el Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación. Entre
las técnicas utilizadas más frecuentemente para estudiar se encontraron la toma
de apuntes y notas. Resultó significativo que casi la mitad manifestó que
empleaba la memorización como técnica para apropiarse de los conocimientos y
que pocos realizaban mapas conceptuales, cuadros comparativos o esquemas. Las
fuentes utilizadas más frecuentemente para estudiar fueron las presentaciones PowerPoint
que ofrecían los docentes. Entre los estados que generaban mayor pérdida de
concentración en el momento del estudio, se hallaron el uso del celular, los
problemas con el trabajo y las dificultades económicas. Predominaron los
estudiantes que consideraron que la mayor parte de las veces existía relación
entre lo estudiado y las prácticas de laboratorio y preprofesionales. La
mayoría declaró que, con el incremento de las horas de actividades prácticas y
complementando las clases con materiales audiovisuales, aprenderían mejor los
contenidos. Los resultados señalados advierten la necesidad de crear una
estrategia para mejorar los hábitos de estudio de los estudiantes desde el
inicio de la carrera, en cada uno de los escenarios educativos, desando que las debilidades y
potencialidades identificadas en esta investigación permitan al colectivo
docente diseñar líneas de trabajo que contribuyan a fortalecer el proceso
docente educativo en la Institución.
Referencias
Acevedo,
D., Torres, J. D., & Tirado, D. F. (2015). Análisis de los Hábitos de
Estudio y Motivación para el Aprendizaje a Distancia en Alumnos de Ingeniería
de Sistemas de la Universidad de Cartagena (Colombia). Formación
universitaria, 8(5), 59-66. https://dx.doi.org/10.4067/S0718-50062015000500007
Agama-Sarabia,
A., Trejo-Niño, G., De-la-Peña-León, B.,
Islas-Ortega, M., Crespo-Knopfler, S., Martínez-Felipe, L., & González-Velázquez,
M.S. (2016). Recursos audiovisuales en la educación en enfermería: revisión de
la literatura. Enfermería Global, (47),
512-525. Recuperado de
http://scielo.isciii.es/pdf/eg/v16n47/1695-6141-eg-16-47-00512.pdf
Araya
Leal, S., Bianchetti Saavedra, A., Torres Hinojosa,
J., & Véliz Rojas, L. (2017). Expectativas y experiencias de aprendizaje en
la práctica profesional de estudiantes del área de la salud. Educación
Médica Superior, 32(1). Recuperado de
http://www.ems.sld.cu/index.php/ems/article/view/1227/615
Cruz
Núñez, F., & Quiñones Urquijo, A. (2011). Hábitos de estudio y rendimiento
académico en enfermería, Poza Rica, Veracruz, México. Revista Electrónica
Actualidades Investigativas en Educación, 11(3),1-17. Recuperado de
https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=447/44722178008
El
Tiempo. (23 de junio de 2016). El celular, 'un dolor de cabeza' para los
profesores universitarios. Recuperado de
https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-16628201
Guillén
Cadena, D.M., & Cuevas Guajardo, L. (2013). La enfermería… En voz de los
estudiantes masculinos. Rev. iberoam. Educ. investi. Enferm., 3(4), 15-9. Recuperado de
https://www.enfermeria21.com/revistas/aladefe/articulo/86/la-enfermeria-en-voz-de-los-estudiantes-masculinos/
Mazón,
D., Montero, M.J., & Ortiz, D. (2014). Factores que influyen en el
rendimiento académico de los estudiantes de primero, segundo y tercer año de la
Escuela de Enfermería de la Universidad de Cuenca, año 2014 (Tesis de grado).
Recuperado de
http://dspace.ucuenca.edu.ec/jspui/bitstream/123456789/20576/1/Tesis%20Pregrado.pdf
Pineda
Lezama, O. B., & Alcántara Galdámez, N.J. (2017). Hábitos de estudio y
rendimiento académico en estudiantes universitarios. Innovare, 6 (2),
19–34. Recuperado de
https://www.academia.edu/37676982/H%C3%81bitos_de_estudio_y_rendimiento_acad%c3%89mico_en_estudiantes_universitarios
García
Martínez, T. del S., Torres Ledezma, F., Ruiz Contreras, D. A., & Cortés
Medina, S.A. (2014). Hábitos de estudio de los estudiantes del II semestre de
la licenciatura de enfermería de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
Recuperado de http://www.eumed.net/rev/tlatemoani/20/habitos.html
Tessa
Giménez, R., & Silvera, S. (2015). Percepción de los estudiantes de
enfermería sobre las dificultades en su inserción a la práctica clínica de
paciente crítico. Enfermería: Cuidados Humanizados, 3(2), 34-40. https://doi.org/10.22235/ech.v3i2.592
Universidad
Metropolitana del Ecuador. (2019). Reglamento del Comité Cientifico-2019.
Recuperado de https://www.umet.edu.ec/wp-content/uploads/2019/10/umet-reglamento-del-comite-cientifico-2019-cr.pdf
Woodworth, G.E., Chen, E.M., Horn, J.L., & Aziz,
M.F. (2014). Efficacy of computer-based video and simulation in
ultrasound-guided regional anesthesia training. J Clin Anesth.,
26(3),212-21. Doi: 10.1016/j.jclinane.2013.10.013