Artículo Original

 

 

Poblaciones Chachis y Afrodescendientes: Relación con la Gestión y Conservación en el Parque Nacional Cotacachi Cayapas

Chachis and Afro-descendant Populations: Relationship with Management and Conservation in the Cotacachi Cayapas National Park

Mérida E. Ortiz Castro y Alejandra V. Bastidas Gómez

Pontificia Universidad Católica del Ecuador, Esmeraldas

 

 

 

La correspondencia sobre este artículo debe ser dirigido a Mérida E. Ortiz Castro.

Email: merida.ortiz@pucese.edu.ec

 

 

Fecha de recepción: 17 de diciembre de 2022.

Fecha de aceptación: 13 de febrero de 2023.

 

 

 

 

¿Como citar este artículo? (Normas APA): Ortiz Castro, M.E., & Bastidas Gómez, A.V. (2023). Poblaciones Chachis y Afrodescendientes: Relación con la Gestión y Conservación en el Parque Nacional Cotacachi Cayapas. Revista Científica Hallazgos21, 8 (1), 63- 71. http://revistas.pucese.edu.ec/hallazgos21/


Resumen

Las áreas protegidas son un mecanismo de conservación in situ para el manejo de la biodiversidad y la protección de los recursos naturales.  La gestión de las áreas protegidas está estrechamente vinculada con el contexto ambiental, económico y social. En este estudio se analizó la percepción de las poblaciones Chachis y Afrodescendientes con la gestión del Parque Nacional Cotacachi Cayapas. Se levantó información a través de herramientas como las encuestas y entrevistas, además de la ejecución de talleres con los actores involucrados. La muestra quedó constituida por los líderes comunitarios, el administrador del área protegida y guardaparques. Entre los resultados principales de esta investigación, se determinó que la población está de acuerdo con la conservación de los bosques, los ríos y la vida silvestre, pero indican que necesitan más apoyo económico y social, para mejorar su estilo de vida.  Se concluye que es de vital importancia procesos a largo plazo de educación formal y no formal, para lograr empoderar a las comunidades en el ámbito de la conservación ambiental y protección de sus recursos.

Palabras clave: Parque Nacional Cotacachi Cayapas; recursos naturales; manejo; conservación; educación formal y no formal.

Abstract

Protected areas are an in-situ conservation mechanism for managing biodiversity and protecting natural resources. The management of protected areas is closely linked to the environmental, economic, and social context. In this study, the perception of the Chachi and Afro-descendant populations with the management of the Cotacachi Cayapas National Park was analyzed. Information was collected through tools such as surveys and interviews, in addition to workshops with the stakeholders involved. The sample was composed of community leaders, the administrator of the protected area and park rangers. Among the main results of this research, it was determined that the population agrees with the conservation of forests, rivers and wildlife, but indicates that they need more economic and social support to improve their lifestyle. It is concluded that long-term processes of formal and non-formal education are of vital importance in order to empower communities in the field of environmental conservation and the protection of their resources.

Keywords: Cotacachi Cayapas National Park; natural resources; management; conservation; formal and non-formal education.

 

Poblaciones Chachis y Afrodescendientes: Relación con la Gestión y Conservación en el Parque Nacional Cotacachi Cayapas

El Parque Nacional Cotacachi Cayapas (PNCCa) es un área natural que forma parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP). Se encuentra ubicado en las provincias de Esmeraldas e Imbabura, en las cuales habitan poblaciones afrodescendientes, mestizas e indígenas, de las nacionalidades Kichwa, Otavalo, Awá y Chachis.

Esta área protegida (AP) forma parte de las Ecorregiones Terrestres Prioritarias (ETP), Tumbes-Chocó-Magdalena y Andes Tropicales. Se caracteriza por ser un ecosistema con alta biodiversidad y endemismo. Se han reconocido un total de 1.258 especies de vertebrados: 139 de mamíferos, 845 de aves, 111 de reptiles, 124 de anfibios y 39 de peces (Ministerio del Ambiente y Agua, 2020).

A su vez enfrenta diversas amenazas, como el aumento de la frontera agrícola, la deforestación, la cacería para subsistencia y comercialización; además, la alta posibilidad del ingreso de actividades con un alto impacto ambiental como la palmicultura y la minería aurífera (Instituto Nacional de Biodiversidad, 2019).

Por parte del Ministerio del Ambiente y Agua del Ecuador (MAAE), a través de técnicos y guardaparques, se realizan diferentes actividades para la conservación de los recursos naturales; entre ellas, el monitoreo y control de la biodiversidad, la educación ambiental para las poblaciones que viven en el área de influencia de la reserva y proyectos de desarrollo comunitario. Sin embargo, la conservación de estos recursos debe ser una tarea no solo de guardaparques y técnicos, sino también deben considerarse como un aliado a las comunidades ancestrales, que durante años han convivido con las AP y sus recursos (Ministerio del Ambiente, 2007).

Las poblaciones que viven en la zona de amortiguamiento de la reserva son comunidades rurales, sin acceso a fuentes de trabajo remuneradas y sin servicios básicos como el agua potable, telefonía móvil e internet. Estas poblaciones dependen de los recursos naturales, ya que del bosque y los ríos extraen sus principales fuentes de proteínas como los peces y la carne de animales silvestres como lo son la guanta, saínos, tatabra y armadillo (Gobierno Autónomo Descentralizado Parroquial Rural de Telembi, 2015). La relación entre las poblaciones y las AP pueden ser positivas o negativas, dependiendo de las restricciones o ventajas que se brinden al ser parte de un área de conservación.

Debido a esto, con el presente trabajo se desea conocer cuál es la perspectiva socioambiental de las poblaciones Chachis y Afrodescendientes sobre el AP y su gestión actual, además de promover cambios de comportamiento en las comunidades hacia actividades más amigables con la conservación del AP.

 

Método

La presente investigación se desarrolló en la zona baja del PNCCa, específicamente en el cantón Eloy Alfaro, parroquia Telembí de la provincia de Esmeraldas. Se seleccionaron 5 comunidades: San Miguel y Viruela (poblaciones afrodescendientes) y Corriente Grande, Calle Mansa y Estero Vicente (poblaciones chachis), las que se encuentran ubicadas a lo largo del río San Miguel.

El alcance de esta investigación mixta es descriptivo, donde se utilizó como herramientas las encuestas y entrevistas para poder recolectar información específica en el ámbito social y técnico. Las encuestas se aplicaron en la población adulta de las 5 comunidades y las entrevistas a líderes comunitarios, guardaparques y administrador.

Por un lado, se buscaba obtener información directa por parte de las comunidades y los líderes comunitarios, ya que son las personas que conviven con las problemáticas y los beneficios de ser poblaciones cercanas al PNCCa. Pero también se ha considerado el punto de vista de la autoridad ambiental, que es el MAAE, específicamente de los profesionales que forman parte del AP, ya que ellos presentan una visión desde la parte técnica y entienden el ámbito de la conservación según varios escenarios.

Por último, se realizaron talleres en cada comunidad para conocer su perspectiva en relación con el área protegida y además, a partir del conocimiento local, promover acciones específicas que se encaminen al desarrollo de su comunidad y la conservación del AP. Los talleres se realizaron a través de varias herramientas, como lluvia de ideas, mapas parlantes, conversatorios y diálogos.

 

Resultados

Los principales resultados que se obtuvieron de esta investigación reflejan las percepciones de cada uno de los involucrados en la gestión actual del AP. Además, también se reflejan las perspectivas de las comunidades para el desarrollo local y la conservación de la naturaleza.

Para las encuestas realizadas, el 93% de las comunidades afrodescendientes y el 98% de las comunidades chachis conocían que vivían cerca del PNCCa. El 77% de las comunidades afro considera que la gestión del área protegida es muy eficiente, mientras que solo el 54% de la población chachi lo considera de esta manera.

También se destaca qué, para los afros, la principal dificultad en su desarrollo comunitario como parte del área protegida es la falta de comunicación en un 30%, la poca cooperación en un 3%, las prohibiciones en un 27% y la ausencia de alternativas en un 3%. En las comunidades chachis establecen, que la falta de comunicación es un 52%, poca cooperación el 10%, prohibiciones el 22% y ausencia de alternativas el 2%.

En cuanto si se han ejecutado programas o actividades entre la comunidad y el área protegida, ambas comunidades confirman que sí se han realizado acciones por parte del MAAE, más que estas no son suficientes.

Referente a las actividades que son permitidas realizar dentro del área protegida por la comunidad, ellos mencionan la pesca artesanal y la agricultura, y las que están prohibidas (la tala de árboles y la minería).

Es necesario destacar los aspectos positivos del área protegida, como son la organización y la responsabilidad de los guardaparques en un 66% y 28%, mientras las iniciativas de integración y los programas inclusivos solo son un 2%.

A través de las entrevistas los líderes comunitarios pudieron expresar diferentes opiniones en cuanto a la situación actual de cada comunidad. Se pudo identificar que existen buenas relaciones entre las poblaciones afrodescendientes y chachis, algo importante ya que viven en el mismo río y territorio, y a la vez enfrentan las mismas luchas y dificultades. Cada líder representa a su comunidad y es el pilar fundamental para guiar a su gente hacia el cumplimiento de objetivos comunes. A continuación, se mencionan algunas de las ideas principales que se obtuvieron de las entrevistas realizadas:

“Nosotros no hemos tenido problemas con el AP porque nos consideramos conservacionistas, un pueblo de emprendimiento con otras alternativas, con metas turísticas”.

 “Nuestro pueblo depende de lo que nos da el río y el bosque. Necesitamos que nuestros niños coman. Los peces y los animales del monte son nuestra fuente de comida; otras veces es necesario vender madera para obtener dinero”

“Necesitamos la ayuda de las autoridades, somos un territorio abandonado que necesita desarrollarse y crecer económicamente. Aunque queremos conservar el bosque, a la vez también necesitamos vivir dignamente”.

Por otro lado, en este trabajo también se identificó cual es la visión de los guardaparques sobre la gestión del PNCCa, ya que ellos son parte de la autoridad ambiental en la zona, y se movilizan en todas las comunidades para cumplir con las actividades del Plan de Manejo; también aportan al desarrollo de las comunidades a través de proyectos económicos como viveros y siembra de árboles frutales.

Algunas de las declaraciones de los guardaparques son:

La relación con las comunidades es bastante buena, ellos conocen el trabajo que realizamos y nos informan si ven personas ajenas en el territorio. En las charlas que tenemos hablamos de que hay que evitar la tala indiscriminada, evitar la caza y pesca para comercialización”.

“Hemos notado la participación de las comunidades en nuestras tareas como guardaparques, ellos nos ayudan a vigilar el territorio, son nuestro mayor apoyo en la gestión”.

Los guardaparques también reconocen el esfuerzo de trabajar en una gran extensión geográfica y que muchas veces el personal no es suficiente para cumplir todas las actividades y metas establecida para el PNCCa. Se que se necesitan recursos para la movilización, que es únicamente fluvial, para comprar materiales como GPS, cámaras fotográficas y binoculares, entre otros.

Con los talleres realizados en cada comunidad se logró que los miembros de la comunidad logren comunicar la importancia de vivir en sus comunidades y en el área de influencia del AP, además de promover iniciativas que apoyen a la gestión y conservación de los recursos naturales. También se vio reflejada la necesidad de promover la educación ambiental en el ámbito formal y no formal, por periodos más prolongados de tiempo, para realmente lograr cambios de comportamiento en la población y actitudes positivas hacia la conservación del bosque y los recursos naturales.

Algunas de las ideas para promover actitudes positivas en el territorio son:

·  Promover los emprendimientos en las comunidades para fomentar el comercio, la compra y la venta de productos.

·  Fomentar las actividades turísticas en la zona, para que más personas conozcan el PNCCa, y que las comunidades sean participe, a través de servicios de guianzas, hotel y restaurante.

·  Apoyar a las actividades agro productivas, ya que la agricultura es uno de los principales sustentos económicos para las poblaciones.

·      Establecer estrategias continuas de educación ambiental para las escuelas y colegios, y así desde la educación fomentar la importancia de la conservación de los recursos naturales.

 

Discusión

En la constitución del Ecuador se reconoce que somos un país intercultural y plurinacional, que busca construir una sociedad que viva en armonía con la naturaleza y alcanzar el buen vivir (Sumak kawsay) y establece los derechos colectivos de los pueblos y nacionalidades y los derechos de la naturaleza. Por esta razón es importante entender que, desde nuestra normativa a nivel nacional, se establecen las bases para buscar una sociedad más sostenible, representativa y equitativa, donde nuestros pueblos y la naturaleza pueden convivir en armonía.

Las AP se han convertido en un instrumento para la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad en todo el mundo, y a través de diferentes mecanismos legales en cada país, se ha podido efectivizar la creación, manejo y gestión en cada territorio. Sin dudas, las AP presentan una gran controversia, ya que deben lograr no solo un proteccionismo aislado del medio ambiente, sino también se deben respetar los derechos y valores de las comunidades relacionadas con los territorios de conservación (Oviedo, 2008).

Sin dudas el PNCCa se constituye como un espacio para la conservación de la biodiversidad de la zona. Con el trabajo conjunto de técnicos y guardaparques se logran establecer acciones concretas para el manejo y protección de la biodiversidad, del bosque y del recurso agua. A través de esta investigación se demuestra que las comunidades entienden el valor de la naturaleza. Sin embargo, existe el dilema de sobrevivir en un medio donde escasean los ingresos económicos, el acceso a servicios básicos y fuentes de empleo fijas.

Según los resultados de las entrevistas a líderes comunitarios de la población afrodescendiente, ellos conocen que viven en la zona de influencia del área protegida y apoyan las actividades orientadas a la conservación; un ejemplo es la comunidad de San Miguel, que quiere promover el ecoturismo como alternativa sostenible de conservación e ingresos económicos para las familias.

 Por otro lado, las comunidades chachis como Calle Mansa, que viven incluso más cerca de los límites del AP, se enfrentan aún con mayores dificultades, ya que no existen muchas alternativas de ingresos económicos para las familias y necesitan del bosque para proveer de alimentación para las familias. Muchas veces han encontrado ingresos económicos en actividades extractivas como la venta ilegal de madera.   Cabe destacar que estas comunidades poseen sus territorios ancestrales legalmente establecidos a través de los Centros Chachis, y que las problemáticas van más allá del ámbito de la conservación, ya que las nacionalidades indígenas se enfrentan a la lucha por el reconocimiento de sus derechos colectivos, territorialidad, costumbres y lenguaje.

Desde el punto de vista de la gestión y el manejo, los técnicos y guardaparques, consideran que existen dificultades en el ámbito de la sostenibilidad de las AP, ya que es un territorio extenso de 272.030 ha, con más de 98.721 personas que viven en el área de influencia del PNCCa. Esto conlleva un gran esfuerzo en el ámbito de recursos para la operatividad y gestión del área. Como principal herramienta para la gestión en el AP, se crea el Plan de Manejo, donde se establecen 5 programas para la intervención en el área: 1. Control y Vigilancia 2. Comunicación, Educación y Participación Ambiental (CEPA) 3. Monitoreo de Biodiversidad 4. Uso Público y Turismo 5. Administración y Planificación (Ministerio del Ambiente y Agua, 2020).

Hoy en día muchas veces puede existir un enfoque parcial en el ámbito de la conservación, ya que hay una imposibilidad de relacionar los temas técnicos y administrativos con la vida política, económica y social de las poblaciones. Para lograr un adecuado proceso de gestión es necesario un contexto más integral y tener en cuenta no solo el ámbito ambiental sino también los aspectos culturales, costumbres, tradiciones y saberes ancestrales (Kingman, 2007).

Torrescano et al. (2018) definen algunos factores importantes para que las poblaciones acepten el AP. Estos son: la antigüedad de la comunidad, el proceso de establecimiento del AP, el origen étnico de los pueblos, la ubicación de las comunidades y la interacción con investigadores e instancias gubernamentales. 

En nuestro estudio los factores que más inciden en la aceptación del AP son el acceso al territorio (conflictos límites entre la comunidad y el AP), limitaciones y restricciones para la ejecución de actividades extractivas y productivas, ausencia de instituciones públicas y privadas que promuevan el desarrollo económico de la zona. Sin duda es importante mencionar que cada AP en el Ecuador enfrenta condiciones ambientales, sociales y económicas distintas; por lo tanto, la percepción de cada comunidad será distinta en relación con el AP de la cual forman parte.

Ordoñez (2019) recomienda que desde la visión de la ecología y las políticas de conservación es necesario que la creación del área protegida sea participativa y no impositiva, que debemos cambiar las ideas tradicionales de la conservación y promover que las comunidades sean parte del proceso, ya que así como sucedió en la Reserva Ecológica Mache Chindul, donde ya estaban asentados varias poblaciones  antes de que de declarará la zona como área de conservación, generando tensiones entre las comunidades, tenemos el caso de muchas AP, donde las poblaciones no se sienten parte del AP.

Es de vital importancia integrar a las comunidades afrodescendientes y chachis en las actividades de protección de esta AP, ya que muchas veces existen limitaciones y restricciones para las poblaciones y pueden tener percepciones negativas hacia la gestión del AP. Una de las mejores estrategias para garantizar la gestión operativa del AP es mantener y mejorar los acercamientos con las comunidades a través de iniciativas inclusivas que permitan que el MAE tenga una imagen como ente coordinador y articulador en lugar de un ministerio sancionador y restrictivo, (Ministerio del Ambiente, 2016).

Sin duda ambas comunidades necesitan del apoyo del Ministerio del Ambiente y Agua, y de los Gobiernos Autónomos Descentralizados, para lograr lazos más estrechos con la conservación, el desarrollo de las comunidades y garantizar la calidad de vida. Latorre (2008), plantea el pago de servicios ambientales como una posible alternativa para reducir las externalidades negativas sobre el medio ambiente y reducir la pobreza en las poblaciones. Sin dudas estos tipos de incentivos para la conservación son una alternativa positiva para reducir las brechas entre la conservación y el desarrollo económico de las comunidades. Un caso exitoso es el Programa Socio-Bosque que busca proteger los bosques nativos en todo el país.

Actualmente a través de la Estrategia Nacional de Educación Ambiental para el Desarrollo Sostenible 2017 – 2030, del Ministerio del Ambiente, 2018, ya se busca impulsar el desarrollo de una identidad y conciencia ambiental en la población ecuatoriana, tanto de niños, jóvenes y adultos. Sería importante que en el PNCCa se logren involucrar los diferentes actores, para desarrollar metodologías específicas y poder implementar programas educación ambiental formal y no formal de manera permanente y estratégica.

 

Conclusiones

Las poblaciones afrodescendientes y chachis mantienen percepciones divididas en cuanto el convivir con las políticas de conservación que se establecen en el PNCCa. Por un lado, cada vez son más conscientes de la importancia de proteger el bosque, el agua y la vida silvestre, pero por otro lado se ven en la necesidad de explotar estos recursos porque también necesitan de recursos económicos para poder sobrevivir en una comunidad con ausencia de servicios públicos y fuentes de empleo.

Cabe destacar los esfuerzos por parte de técnicos, guardaparques y administrador del PNCCa, para incluir a las comunidades en el proceso de gestión, promover procesos de educación ambiental e incorporar proyectos sociales como la creación de viveros comunitarios y siembra de árboles frutales.

Es necesario que se establezcan programas de educación ambiental formal y no formal en las diferentes comunidades, y con esto lograr establecer acciones a mediano y largo plazos que logren cambios en el comportamiento que tienen los niños, jóvenes y adultos en el territorio donde viven.

Se espera que todas las instituciones públicas y privadas que hacen parte de esta gran lucha para la conservación de los recursos naturales del país logren empoderar a las comunidades afrodescendientes y chachis, para que sean ellas quienes se apropien de sus territorios, costumbres, tradiciones y cosmovisión y a la vez que logren ser parte activa en la gestión de la reserva, en apoyo a las autoridades correspondientes.


 


Referencias

 

Gobierno Autónomo Descentralizado Parroquial Rural de Telembi. (2015). Plan de Desarrollo y Ordenamiento Territorial 2015-2019. Esmeraldas, Cantón Eloy Alfaro. https://app.sni.gob.ec/sni-link/sni/PORTAL_SNI/data_sigad_plus/sigadplusdocumentofinal/0860027950001_PDOT%20GAD%20TELEMBI%202015-2019_30-10-2015_20-18-48.pdf

Instituto Nacional de Biodiversidad. (2019). Actualización del Plan de Manejo de la Reserva Ecológica Cotacachi Cayapas. Quito. http://inabio.biodiversidad.gob.ec

Kingman, S. (2007). Áreas Protegidas y Pueblos Indígenas Un Estudio de Caso en Ecuador. Quito: Fundación Natura en el marco del Programa FAO/OAPN (Organismo Autónomo Parques Nacionales de España) sobre “Fortalecimiento de Manejo Sostenible de los Recursos Naturales en las Áreas Protegidas de América Latina. https://www.miteco.gob.es

Latorre, S. (2008). El Pago de servicios ambientales por conservación de la biodiversidad como instrumento para el desarrollo con identidad. Quito: Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales. https://repositorio.flacsoandes.edu.ec

Ministerio del Ambiente. (2007). Evaluación de Efectividad de Manejo de la Reserva Ecológica Cotacachi. Quito: Proyecto GEF: Ecuador Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP-GEF). http://maetransparente.ambiente.gob.ec

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Ministerio del Ambiente y Agua. (2020). Plan de Manejo del Parque Nacional Cotacachi Cayapas. Quito: Conservación Internacional Ecuador: Critical Ecosystem.

Ordoñez, A. (2019). Ecología política de la conservación: la Reserva Mache Chindul - Ecuador. Ecuador Debate, 137-147. https://repositorio.flacsoandes.edu.ec

Oviedo, G. (2013). Áreas protegidas, desarrollo y cultura. Letras Verdes. Revista Latinoamericana de Estudios Socioambientales, (2), 2-4. https://doi.org/10.17141/letrasverdes.2.2008.809

Torrescano Valle, N., Prado Cedeño, Á., Mendoza Palma, N., Trueba Macías, S., Cedeño Meza, R., & Mendoza Espinar, A. (2018). Percepción comunitaria de las áreas protegidas, a más de 30 años de su creación en Ecuador. Revista Trace, 0(74), 60-91. doi:http://dx.doi.org/10.22134/trace.74.2018.166